Tras una hora de bus llegamos a Cabo Cañaveral. En este caso no visitamos un parque de atracciones, sino una base de expulsión de lanzaderas.
Nos tocaba un día repleto de exposiciones, películas y una excursión de dos horas en bus que nos haría conocer las más grandes conquistas del hombre en el espacio.
Nada más entrar, ya empiezas a darte cuenta de todo lo que te queda por ver durante unas cuantas horas.
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Tuvimos suerte y pudimos ver el Discovery, colocado para despegar el 28/10/1998 con John Glenn (en ese momento tenía 77 años) entre sus tripulantes para estudiar los efectos del vuelo espacial en los ancianos.
Fue un lugar que disfruté muchísimo, es super interesante.
Y, como despedida, mi hermana y yo nos hicimos una foto como astronautas.
De vuelta a los apartamentos, paramos para ver algunas tiendas y luego a seguir nuestro rito diario.
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